El Tekko o Tetsubuki es un puño metálico o de madera con puntas de refuerzo similar al conocido "puño americano” que aumenta sensiblemente la eficacia de las manos en las acciones de golpear y bloquear. El diseño suele variar, siendo el más común el que tiene la anchura de la mano del practicante con tres puntas salientes hacia el frente.
Fue el Shinko Matsuhara Sensei natural de Naha (Okinawa) quien perfeccionó las técnicas empleadas con este arma junto a los maestros Harikawa y Yabuki a principios del siglo XX.
Debido al tamaño y forma del Tekko, las defensas suelen realizarse con la mano abierta, y los ataques con el puño cerrado, golpeando con los tres puntos salientes de este arma.
Se dice que la práctica y estudio del Tekko es poco apreciado por ser el arma más polémica desde el punto de vista legal, pero los kobudokas de alto nivel lo consideran parte integral de su formación marcial.
El Tecchu es de hierro, aunque ocasionalmente se hace de madera, y tiene un anillo punzante en el centro donde se introduce el dedo corazón, quedando los extremos a ambos lados del puño. Como es evidente, el Tecchu se utilizaba para endurecer los golpes dados con el puño a la vez que podían usarse los extremos para golpear en forma de apuñalamiento. Otros nombres y variantes de este arma son el Suntetsu, el Dokko, el Yawara, el Yubibo y el Tenouchi.
Se cree que su origen es pesquero, ya que se han encontrado objetos muy parecidos en la antigua China para la reparación de redes de pesca. Es posible que fueran empleados como armas defensivas en enfrentamientos y reyertas entre pescadores. Como ocurre con otras armas de Kobudo, el Tecchu evolucionó de ser una herramienta cotidiana a arma eficaz e inclusive letal.
La evolución del Tecchu en nuestros días es el llamado Kubotan, que aunque creado por el maestro japonés de Karate Takayuki Kubota, fue en EE.UU. donde se popularizó entre los cuerpos policiales en los años 70. El Kubotan originalmente era un cilindro de unos 14 cm de largo por 1,5 cm de grosor -aunque los diseños pueden variar- y su objetivo es dominar al oponente sin infringir daños permanentes. Se trata de un arma no letal muy efectiva en Defensa Personal y muy discreta. Por sus características, sería complicada y ambigua su regulación legal, ya que hasta un bolígrafo o un simple cilindro de madera puede convertirse en Kubotan.
Raúl Cabral.
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