El Tetsubō es un arma japonesa de hierro o acero, o bien de madera con la cabeza forrada de metal, y posee un aspecto parecido a un bate de baseball, aunque con puntas de hierro o cobre. Dichas puntas se colocaron a raíz de la mejora de las armaduras a partir del siglo XIV. En la antigüedad, los nobles y hombres adinerados a menudo usaban puntas de plata u oro. El mango suele ser cilíndrico, pero la cabeza puede variar (cilíndrica o en forma de paralelepípedo). El Tetsubō tiene un peso de hasta 5 veces superior a un bate y unos 40 centímetros más largo, aunque también se solían hacer de otros tamaños más pequeños (algunos se podían manejar con una sola mano).
El manejo de este arma requiere fuerza y habilidad por su considerable peso, y en el Japón medieval era habitualmente usado en las batallas por su poder devastador al llegar a romper los huesos de un guerrero incluso llevando armadura.
En la mitología nipona se cita reiteradamente este imponente arma, asociándose a unos demonios llamados Oni. El Tetsubō fue usado por criminales y delincuentes a partir del periodo Edo, durante los siglos XVII al XIX.
El Arte Marcial que engloba las técnicas del Kanabō es el Kanabō Jutsu y para su manejo, como ocurre con el Tetsubō, el soldado desarrollaba la fuerza y habilidad necesarias para no ser contraatacado fácilmente por el enemigo en caso de fallar el golpe.
Raúl Cabral.
Nota: hay versiones que llaman con el mismo nombre a ambas armas, sin distinguir el que es metálico del que es de madera maciza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario